domingo, 6 de mayo de 2018

La escritora.


La escritora.


Nunca te haz quedado sentado en una plaza mirando a la gente pasar y pensando: Oye ¿Y cuáles serán los sueños frustrados de estas personas? ¿Estarán buscando la manera de cumplir sus metas todavía? O ¿Se habrán rendido ante las corriente social que nos vuelve cada dia mas fríos y desalmados?. Hoy fue un dia asi para mi, sentarme con un cigarro en la mano y mi lápiz en el otro mientras veía pasar a tanta gente tan diferente y al mismo tiempo tan parecida.. Que me fue imposible no escribir los detalles de algunos que pasaban, buscando una historia entre lo que sus ojos me decían: Vi a un joven de aspecto rudo, barbudo, tatuado y con ojos sombríos, claramente alguien cuya existencia no fue fácil jamás por las cicatrices que su rostro y cuello dejaban ver... Sosteniendo un peluche rosa gigante el cual rompe todo el esquema que su estructura forma y volviendo esa sombría mirada en una sonrisa pura y limpia al ver correr hacia él a una pequeña emocionada, claramente la luz de su vida y el motivo por el que un hombre asi dejara la chaqueta de cuero. Una mujer que lentamente pasaba con un teléfono en su mano, hermoso cuerpo, bella cara pero... En sus ojos no se siente nada, sentándose cerca mio y contestando diferentes llamadas mientras bebía su café pude entender que, solo era el producto de múltiples traiciones pasadas y que ahora usaba su bello ser para lograr lo que deseaba, cosa la cual ella misma olvido en el camino. Un tercero que hoy podía detallar era un joven que de cierta forma me recordaba a un yo pasado, con mirada soñadora, un cuaderno lleno de dibujos, frases y bañado de ilusiones... Pobre chico, le espera un largo camino de decepciones y pesares para forjar su camino como artista en este mundo frío, que no da lugar a los soñadores como él y yo. Muchas más personas pasaban frente a mi, algunas deslumbrando mientras otros solo buscaban perderse entre la multitud y entre ellos noté a alguien, una persona en especial, que me recordó a mi, una muchacha de ojos cafe, pelo castaño rizado y labios.gruesos hermosos, pero que ya no sonreía, se veía igual a mi, porque pese a estar entre gente conocida y querida, se le sentía sola, pese a verse como alguien que no está mal en su morada, sale a diario porque sabe que no es un hogar ya para ella, que aunque viva entre iguales, no deja de sentirse diferente por algún extraño motivo y fue así, que mi mente seguía buscando motivos para conectarse a ella cuando nuestras miradas al fin se cruzaron y al ver sus ojos en mi dirección... Supe que también me miraba y que su cuaderno al igual que el mio, apuntes sobre quien podría ser guardaba. Sonrió al notar cómo cambiaba mi expresión y sabiendo que con solo su mirada me había dejado desarmado se acercó hacia donde estaba sentado, se inclinó extendió su mano y arrebato de mi boca el cigarro para posarlo sobre sus labios y absorber de forma casual el crudo sabor del malboro que al parecer tambien conocia. al soltar el humo me miró y con una traviesa mirada me dice: Te invito a unir tus historias con las mías, que te parece... ¿Te animas a unirte a mi en esta travesía?.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entrada mas vista del mes

La Bridante y el Bosque

"Siempre anhele sentir la bruma en mi piel desnuda" Solía decir ella mientras observábamos como la misma envolvía el lejan...